Nada.

by - 23:44

Hoy me di cuenta de que la causa de tanta decepción amorosa, es que buscamos un prototipo de persona que no existe. Creamos a un ser perfecto en nuestra mente, y nos aferramos a él. Y antes de darnos cuenta, estamos comparando a todo el mundo con esa idea, o incluso, tontamente llegamos a pretender “cambiar” a alguien, para nuestro beneficio propio. Y al no lograrlo, nos quejamos y decimos que “todos/as son iguales”, cuando en realidad, lo que pasa es que todos/as son diferentes a nuestro ser perfecto.

¿Tiene solución? No. Lo siento. El hecho es que es algo establecido por la mente, y alimentado por complejos propios, pero siempre nos aferraremos a ello y, por lo tanto, buscaremos en ésa persona cualidades lo más similares posibles a las que inventamos a lo largo del tiempo. Por desgracia, esto solo nos lleva a perdernos de algo mucho mejor, algo real.

¿Qué influye para la creación de éste ser mágico y perfecto? Depende. Depende tanto como depende el tipo de música que escuchamos, las películas que vemos o los libros que (no) leemos. La mayoría, como en todo, se guía por lo que le venden: una relación totalmente física, disfrazada de algo dulce con palabras cursis y regalitos caros. Pero que, en realidad, solo es un deseo sexual cubierto. Por lo tanto, al ser una relación superficial y socialmente marcada como “perfecta”, se basa completamente en un buen físico y estatus social. Comparten temas de intereses promedio, cosas de actualidad y actividades en común. El punto clave en éste tipo de relaciones es el sexo, a mayor o menor escala. De primera, a tercera base. Éste tipo de relación fracasa cuando el interés físico se pierde, se aburren fácilmente y se ven atraídos por alguien más.

En otros casos, el ser perfecto tiene requisitos de otro tipo. Por ejemplo, intelectuales. Estos seres, más creativos y complejos, son creados por personas un poco más reflexivas, pero no menos superficiales. Al preguntarle a éste tipo de personas cómo sería su chico/a perfecta, va a responderte hasta de qué lado de la cama prefiere dormir. Suele buscar personas con cualidades similares, o bien, que complementen a las suyas, por lo tanto, se puede decir que son personas un tanto narcisistas, en busca de sí mismas. O por el contrario, personas sumamente inseguras que temen a lo diferente. Obviamente, encontrar a ésta persona perfecta, resulta prácticamente imposible.

La solución a este problema, sería acabar con nuestros complejos infantiles. Aprender a valorar tanto nuestras virtudes como las de los demás. No buscar una relación física, sino enriquecedora. Abrir la mente un poco para encontrar a alguien que complemente nuestras ideas y de lugar a la reflexión. Por desgracia, siempre existen pretextos para evitar la solución y terminamos en donde mismo. Tal vez es hora de aceptar la realidad y madurar un poquito. O bien, continuar siguiendo las normas sociales para conseguir la felicidad. Falsa, pero en fin felicidad. ¡Saludos!

You May Also Like

3 comentarios